El Gobierno se derrumba

El Gobierno se derrumba

Cifras y Conceptos, la Universidad del Rosario y El Tiempo, dieron a conocer el Séptimo Estudio de Percepción: “Qué piensan, creen y sienten los jóvenes en Colombia”, el cual arrojó fuerte baja en la favorabilidad del presidente Petro, descendiendo del 61% en noviembre de 2022, al 46% en mayo de 2023, baja que se da en todos los estratos socioeconómicos con marcada incidencia en el bajo, precisamente en el que el Gobierno cree tener asegurada su base electoral. La de Invamer, muestra que el 70% de los colombianos ya lo desaprueban. 

Los sucesivos errores cometidos, donde el país expectante ve con asombro la improvisación y desconocimiento en todas las áreas, es el culpable del desgaste, creando el natural desconcierto que día a día muta hacia el temor y el pánico ante el panorama que se avizora. 

Hace ocho días, Petro denunció un supuesto “golpe blando” contra el Pacto Histórico, al señalar que con “ordenes administrativas se estaba cambiando la representación política que el pueblo eligió para el Congreso”, en directa alusión a la pérdida de la presidencia del Senado de Roy Barreras, al ser declarada nula su elección por el Consejo de Estado, enturbiando aun más el de por sí enrarecido ambiente político. 

El caso del robo de los 7000 dólares, (30 millones aproximadamente) de los supuestos viáticos de la Jefe de Gabinete Laura Sarabia, mano derecha del Presidente, se convierten en boca de Armando Benedetti, embajador en Venezuela, en 150 millones de pesos, cuyo origen se desconoce. 

El nuevo novelón político promete ser interesante, pues ya cobró el retiro temporal de Saravia y Benedetti, sus dos grandes confidentes, mientras termina la investigación. 

Al ordenarle Petro a Benedetti el traslado a Bogotá para conocer las razones del enfrentamiento con su antigua asistente en la UTL del Senado, se descubrió que este se encontraba en Estados Unidos, sin permiso previo de la Cancillería. Precisamente este Gobierno se caracteriza en que cada funcionario hace lo que le viene en gana, pues Petro, absorto en sus Twitters, ni cuenta se ha dado del desplome de su Gobierno. 

El destape de esta caja de pandora ha puesto en evidencia, no solo el manejo de altas sumas de dinero de funcionarios de entera confianza de Petro, “el señor de las bolsas”, sino la comprobación por parte de la Fiscalía de que el grave delito de las chuzadas ha regresado como arma, para conocer conversaciones y movimientos de la oposición. 

Esta nueva crisis ha afectado, y de qué manera, la credibilidad en el Gobierno. Prescindir definitivamente de Sarabia, al término de la investigación, es reconocer que cometió un hecho legalmente grave, quedándose sin su mano derecha. Igual, Sacrificar definitivamente a Benedetti, es ganarse un peligroso enemigo, conocedor como ninguno de muchos de los secretos guardados en todo el proceso de su elección como presidente. 

En agosto de 2018, Colombia dejó de pertenecer a la Unión de Naciones Suramericanas, (Unasur) cuando el expresidente Iván Duque consideró que la organización se había prestado con su “silencio y complacencia para que no se denunciaran los tratos violentos de la dictadura venezolana a sus ciudadanos”. 

Durante el encuentro de los mandatarios suramericanos en Brasilia, Petro anunció que Colombia se reintegrará a la Unasur. Obedeciendo su creación al objetivo de construir un espacio de integración y de unión en lo cultural, social y económico entre sus pueblos, otorgando prioridad al diálogo político ¿tiene justificación en este momento cuando países miembros como Argentina, Chile, Brasil y Venezuela, transitan caminos que los colombianos, en su inmensa mayoría se resisten a aceptar como gobiernos progresistas, cuando son realmente países sometidos a la férula izquierdista? 

El preocupante deterioro en la seguridad pública, como consecuencia de la política de “Paz Total” en la que los delincuentes están siendo puestos en libertad, al tiempo que el presidente irresponsablemente convoca a los jóvenes a las calles a presionar las funestas reformas en que está empeñado, ordenándole a la fuerza pública no actuar ¿no nos está indicando a las claras que este Gobierno se derrumba en medio de la corrupción que prometió erradicar? 

Hasta sus propios congresistas como Catherine Juvinao estalló furiosa: “A punta de patada y puño, yo no voy a lograr que me apoyen y aprueben mis proyectos. Y si lo entiendo yo que soy una primípara en política ¿Cómo no lo entiende usted? Patear todo y acabar con todo, empezando de cero, no es el cambio. Entiéndalo Presidente”.

Alberto Zuluaga Trujillo 
alzutru45@hotmail.com

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