El oficio de político

 

Ingeniero Industrial Alexander Ríos Arboleda

En momentos en que el país debate las decisiones de la Corte Constitucional sobre el aborto. El incremento desmesurado de varios productos de la canasta familiar. El ataque de los delincuentes del  ELN a la comunidad con bombas, voladuras de puentes, incendio de buses y amenazas con la movilidad. El ataque de Rusia a Ucrania. El colombiano que ha tomado como profesión servir en los estamentos institucionales, debe saber todas estas problemáticas, para entender cómo afecta la vida nacional.

En los debates que se llevan a cabo en todos los medios de comunicación, a los candidatos a la presidencia y a los aspirantes a una curul en el Congreso. Los periodistas han sido incisivos en preguntar por la difícil situación que vive el país y las acciones a seguir en caso de obtener su elección. Lo cierto del caso es que la respuesta es unánime. Reforma tributaria para recaudar más recursos que disminuya el déficit fiscal, pero de paso todos afirman que se deben eliminar exenciones tributarias a sectores que se están beneficiando de ellos. Lucha contra la corrupción como medio para volver a que los colombianos crean  en las instituciones. Reactivación económica para generar más empleos y mucha educación que brinde nuevos caminos y se genere competitividad.

El tema de la droga merece un capítulo aparte, el aumento del consumo interno, las amplias zonas de cultivo y jugosa demanda del exterior, nos tiene arrodillados a los colombianos. Varias fórmulas se escuchan, pero desde que en este país no se involucre a la comunidad internacional en la solución, nada servirá.

Luego, el oficio de político no es fácil, porque si lo hace a cabalidad conquistando corazones para que depositen su voto por él, al salir elegido, deberá enfrentar el reto que los otros compañeros de pupitre o las otras ramas del poder público, se sintonicen con la construcción de las soluciones a los problemas de la Nación. 

Dura tarea la de la democracia colombiana ante tantos retos y peligros, las autoridades deberán garantizar un certamen electoral transparente. Ya un candidato a la presidencia se siente inseguro de los resultados, y eso que ha entablado conversaciones con los creadores y administradores del software electoral. Afortunadamente en la contienda han llegado observadores locales y extranjeros que han prendido alarmas para hacer seguimientos estrictos a los comicios en zonas de riesgo, esto facilitara redoblar los controles. Lo que si deben estar atenta las autoridades electorales, es en la compra de votos, ya hace cuatro años se dieron resultados y hoy siguen cayendo fichas de ese escandalo.

P.D. Un puñado de activistas políticos liberales de Pereira, entregó la bandera del partido Liberal al candidato Gustavo Petro, ahora que esa casa política no tiene candidato presidencial propio a la vista. Otros han corrido donde Alejandro Gaviria, Alejandro Char y Juan Manuel Galán.