RELACIONES ENTRE COLOMBIA Y VENEZUELA CONATO FALLIDO

JAIRO ARANGO GAVIRIA

Por unanimidad el senado aprobó una proposición presentada por dos senadores de la Alianza Verde, para reestablecer las relaciones diplomáticas entre ambos países. Estas relaciones se cancelaron por orden del presidente Nicolás Maduro desde febrero de 2019.

Un paso adelante en la normalización del restablecimiento de las relaciones diplomáticas fue la que dio el senado aprobando por unanimidad la creación de una comisión bilateral que trabaje en la normalización de las relaciones. Esta proposición se conoció en Venezuela, por comunicación que enviara el presidente del senado colombiano, Juan Diego Gómez, al presidente del parlamento de Venezuela, Jorge Rodríguez, quien explicó su contenido: “normalización de relaciones diplomáticas, relaciones comerciales y la verificación de las buenas prácticas comerciales entre ambas naciones”.

Esta comunicación cayó muy bien en Venezuela: “El parlamento venezolano se encuentra en plena disposición de comenzar el proceso de normalización de relaciones con Colombia. Vamos a conformar una comisión igual a la que aprobó el senado colombiano”.

El paso a seguir es que el presidente nombre la comisión dijeron los senadores de la Alianza Verde Jorge Guevara y Yesid García: “No vale la pena seguir en un conflicto con Venezuela. Esperamos el apoyo total del Ministerio de Relaciones Exteriores”. La fractura de relaciones se inició cuando el 23 de febrero de 2019, el líder opositor Juan Guaidó intentó atravesar la frontera desde Cúcuta al frente de una caravana de ayuda humanitaria. Por supuesto este conato de derrocamiento del gobierno de Maduro no tuvo ningún éxito. Por el contrario para el gobierno de Colombia fue una derrota bastante sonora a nivel nacional e internacional. Hoy de Guaidó poco se habla y por supuesto no está incluido en las comisiones bilaterales que propenden por el restablecimiento pacífico y diplomático entre Colombia y Venezuela. Pero esto es el pasado.

Con anterioridad a la proposición de la Alianza Verde en el senado, el Presidente Duque ya había hecho pinitos: “Colombia está dispuesto a reabrir los servicios consulares en Venezuela. Estamos abiertos a que si hay las condiciones y si hay las garantías se pueda restablecer ese servicio, pero, obviamente, sobre la premisa de que existan todas las garantías en materia de seguridad”.

Esta apertura por iniciativa del senado colombiano hacia el restablecimiento de relaciones diplomáticas, debe entenderse como un gesto positivo de cerrar la página cuando en el 2019, el gobierno Colombiano desconoció a Maduro como Presidente de Venezuela y le dio el aval a Guaido como presidente interino. Además desconoció los resultados de las elecciones legislativas en Venezuela, ganadas por el chavismo. La expresión de que el régimen de Maduro es ilegítimo no debe continuar si se quiere de verdad reactivar las relaciones bilaterales. Debe haber una clara posición de reconocimiento entre los dos gobiernos, es el camino. Hay que hacerle un duelo al pasado, aunque el senado colombiano reconoce de facto la Asamblea Nacional actual, de amplia mayoría chavista.

Seguramente que esta proposición de la Alianza Verde en el senado de restablecer relaciones con Venezuela va a levantar ampollas por parte de una dirigencia que todavía no pierde la esperanza de “tumbar” a Maduro a través de un golpe violento, al estilo de los mercenarios colombianos capturados en Haiti por el asesinato al Presidente Jovenel Moise y que hoy están detenidos en precarias condiciones.

Apenas un día después de aprobada por unanimidad en el senado, los senadores del partido de gobierno se sintieron “engañados”, y el gobierno que ya había hecho un guiño favorable, reculó, para volver al pasado. Aún le falta otra “caravana humanitaria”

JAIRO ARANGO GAVIRIA
Octubre 2021