Bernabé le pegó a Muchilanga

Bernabé le pegó a Muchilanga

Por ÁLVARO RODRÍGUEZ HERNÁNDEZ

No deja de causar malestar la forma como los gobernantes nuestros, quieren saldar cuentas.

Esta semana por culpa de una decisión judicial, en Derecho, de un alto estamento de la rama, prendió las alarmas de la marrullería criolla.

Mal aconsejado, buscapleitos detrás del escondite, salieron a cobrarle al gobernador del Risaralda, la autoría de exabruptos legales. No es la gobernación quien produce fallos. Le corresponde, por mandato de la propia Ley, revisar todos los Acuerdos Municipales. Se caen los que tienen vicios de forma, mal constituidos y por ligereza de algunos concejales o alcaldes que -como en este caso – quieren ir más allá de adoptar o aprobar medidas tributarias. Digámoslo, también, de errores jurídicos en la elaboración del sustento básico del producto legal. 

La Secretaría Jurídica de la Gobernación, tiene que cumplir con su obligación legal. 

Es tan grave el proceder que es comparable como desconocer que el alcalde Maya, para citar otro ejemplo, tenga participación en el acierto de la legalización de los terrenos cedidos para la construcción del mega hospital de alta complejidad, que tiene nuevas y frescas noticias. Eso no ocurrirá jamás. O, que, en una valiente decisión – criticada por ciertos gremios angurriosos que querían meter la mano y sus narices – le asistió al respaldo redondo para la estructuración pública del peaje o la concesión Pereira – la Victoria, donde el gobierno Maya – los pereiranos- es el gran beneficiado. O, que, el presidente Duque, no le ha asistido a sus eventos porque el gobernador Tamayo, del Risaralda, lo acaparó. O, que, Songo le dio a Borondongo.

Vaya miopía cierta de querer ver la viga en el ojo ajeno. No favorece la presencia de buscapleitos mayores que quieren ver el vaso medio vacío.

Nadie podrá negar el buen manejo de esas relaciones del gobernador Tamayo, del Risaralda, y en altos estamentos.

Una antropofagia parroquial, visceral, que se creía desaparecida, no debe volver por ciertas tunas lanzadas por ansiosos picapleitos escondidos. Agazapados codiciosos.

Tratar de insinuar pecaminosas relaciones entre los dos gobernantes e incluso de algunos alcaldes propensos del Risaralda al olvido, a las selfies, a sus ausencias de las comunidades, a sus bravuconadas por encargo o mandaderos de directorios, ensucian el clima de entendimiento y cordura tapizado con buenas maneras.

Mayor gestión, tocar puertas en Ministerios como el de Hacienda, asesoría en la DNP, .incluso ante ciertos parlamentarios locales, excelentes relaciones, es lo recomendable. 

Abambelé practica el amor

Defiende a tus hermanos

Porque entre hermanos se vive mejor

Abambelé practica el amor, recuerda la gran Celia Cruz. Bernabé le pegó a muchilanga.

alvarocomunicaciones@yahoo.com

ÁLVARO RODRÍGUEZ HERNÁNDEZ

Comentarios

Lo más leído esta semana